
He perdido la cuenta de las veces que alguien llegó a mi oficina con un sobre en la mano y los ojos llenos de miedo.
“Firmé esto, pero no sé exactamente qué es”, me dicen.
Y ahí, justo ahí, empieza todo.
El papel está en inglés. Las palabras suenan legales, formales… pero frías.
Y detrás de cada párrafo hay una historia que no se entiende del todo.
No por falta de inteligencia, sino porque nadie se tomó el tiempo de explicarlo en español.
Cuando buscas una abogada que hable español, no estás buscando traducción literal.
Estás buscando alguien que te escuche como hablas tú. Que entienda lo que callas.
Porque en momentos de crisis, tu idioma es un refugio.
Cuando no entiendes, te quedas callado
Una clienta, mexicana, me contó que en su primera audiencia solo sonreía y asentía.
No quería “molestar”.
No entendía cada palabra del juez, pero pensó que lo importante era parecer tranquila.
Firmó el acuerdo.
Semanas después, se enteró de que la custodia completa era para su exesposo.
No fue descuido. Fue miedo.
Y fue el idioma.
Por eso lo repito tanto: en un divorcio en Fort Worth, hablar español no es comodidad.
Es una forma de protegerte.
Un malentendido, una palabra mal explicada, puede darte o quitarte derechos.
Hablar en tu idioma es recuperar poder
Hay algo que pasa cuando alguien te escucha en tu idioma: te relajas.
Dejas de traducir en la cabeza, de adivinar lo que el abogado quiso decir.
Puedes concentrarte en lo que sientes, no en cómo decirlo.
He visto hombres quedarse callados porque no sabían cómo explicar lo que querían para sus hijos.
He visto mujeres firmar acuerdos injustos solo porque no entendían los términos.
Una abogada hispana en Texas capta esas pausas, esos silencios que dicen más que las palabras.
Y sabe leerlos.
Ahí se construye la confianza.
La cultura también habla
No todos los clientes llegan igual.
Algunos con culpa, otros con vergüenza.
Algunos piensan que divorciarse es un fracaso.
Otros sienten que hablar de dinero es una falta de respeto.
Y uno los entiende.
Porque uno también creció con esa forma de pensar, con esa mezcla de respeto, miedo y orgullo.
Una abogada hispana Texas no solo traduce leyes.
Traduce emociones.
Sabe cuándo guardar silencio, cuándo preguntar, cuándo simplemente dejar que llores un rato antes de seguir.
Lo que cambia cuando te atienden en español
- Entiendes cada papel que firmas.
- No hay miedo de preguntar.
- Recuperas la calma.
- Sientes que el proceso te pertenece.
No es solo comunicación.
Es respeto.
Una historia que me marcó
Un cliente guatemalteco me dijo un día:
“Por fin entiendo mi propio caso.”
Había pasado meses sin saber qué estaba firmando.
Creía que su abogado lo ignoraba.
No era eso.
Simplemente hablaban idiomas diferentes.
Cuando empezamos a hablar en español, su cara cambió.
No porque el problema desapareciera, sino porque por primera vez entendía lo que estaba viviendo.
A veces, eso basta.
No necesitas promesas vacías. Solo alguien que te hable claro, en tu idioma.
Tu historia, tus palabras, tu idioma
Si estás pasando por un divorcio en Fort Worth, no dejes que el idioma te deje afuera de tus propias decisiones.
En The Law Office of Stephanie Lugo, PLLC, te escuchamos en español, sin intérpretes, sin traducciones forzadas, sin miedo a no entender. Reserva tu cita hoy mismo y da el primer paso con claridad y confianza.
Podemos conversar sin compromiso, revisar tu situación y explicarte exactamente qué opciones tienes, paso a paso, en tu idioma. Cada historia importa.
Y la tuya merece ser contada con tus propias palabras.

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